martes, 9 de diciembre de 2008

¿Creer en la Ciencia?...

Hace unos pocos días, desde su poderosa palestra en la prensa, un articulista hacía apología del ateísmo. Remataba proponiendo que, aquellos que querían creer en algo, se aferraran a la ciencia porque, según él, allí estaban a punto de encontrar todas las respuestas, es decir: la Verdad.



Su planteamiento se limita casi exclusivamente a la negación de Dios y a elevar la ciencia a la condición de religión. Ante tal oferta, como primera reacción, la prudencia para responder. ¿Creer en la Ciencia? ¿Pero qué es la ciencia? La ciencia (scientia) es esencialmente conocimiento. Pero no el conocimiento que tiene cualquier animal. Es conocimiento humano: sistematizado, razonado, probado metódicamente. Conocimiento que hemos alcanzado y acumulado solo gracias a nuestro nivel de Conciencia (conscientia). Esta última es una propiedad del espíritu que nos permite reconocernos a nosotros mismos y nuestra temporalidad, y nos ayuda a diferenciar el bien del mal. Si tenemos espíritu dejamos de ser solo materia. Y entonces nos damos cuenta que precisamente vivimos, no porque seamos materia sino porque tenemos espíritu.



¿Y de dónde viene este espíritu? ¿Acaso conocemos de algún logro científico en el que se haya sintetizado algún espíritu de laboratorio? La ciencia apenas puede explicar las nociones de la evolución. La ciencia no ha podido proporcionar una respuesta para explicar el origen de la vida, y no podrá hacerlo porque la respuesta no es científica.



Definitivamente somos las únicas criaturas de este mundo que, gracias a la conciencia que se nos ha dado, podemos llegar a conocer a Dios. Pudiera concordar con el referido articulista en un punto. Si alguno no cree en nada y necesita comenzar a creer en algo, puede dar un primer paso comenzando por la ciencia. Querer creer ya es, en sí mismo, vocación del espíritu. A diferencia del articulista, mi invitación es a que no se quede allí y continúe avanzando hasta encontrarse con Dios.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario